miércoles, 26 de diciembre de 2012

Que nunca nos falte


Con esta introducción, mi querido amigo Alberto nos envió este mensaje que me encanto para compartir con ustedes!

Os deseo una Feliz Navidad, que la ternura tenga sitio en la mesa, que en el menú del alma haya sitio para los otros, que recordemos a quienes nos faltan con la alegría con la que vivieron y que nos deseemos mejores y mejorables como augura ese hermoso duende del Caribe.


QUE NUNCA NOS FALTE
            Alberto Montoya

Amada, que no falte ese aliento,
ese instante en la alterada tarde
cuando el viento mece las nubes
y abre ventanas en el cielo.

Que no nos falte ese árbol, esa fruta
invitando a puertas prohibidas,
ese error en el camino, esa conjura
 espantando fantasmas, dramas y huidas.

Que no nos falte el clamor de una ola,
la espuma bañándonos los pies desnudos,
la mar brava rompiendo sobre las rocas,
un horizonte inesperado, un alud de suspiros.

Que no nos falte un trozo de mesa, un techo,
un vaso y la sed de la noche oscura
llenando la boca de preguntas y hambre,
trayendo el universo a nuestros pechos.

Que nunca falte tiempo al tiempo
para obligar a detenerse a los relojes,
para escuchar las alas de las cigüeñas
colmando de comienzos los corazones.

Que nunca falten razones, amada mía
para abrir de par en par la luz de la mañana,
para decirnos 'te quiero', con toda el alma
en el café primero con que comienza el día.

25 de Diciembre de 2012